Cuando jugar a la pelota era tan peligroso como ...
Las plantas.Ese era el problema.Un fondo tan grande y no poder jugar a la pelota en el el, porque siempre se metian en el medio las plantas. Que se yo ¿y si era porque querian jugar? Pero no era esto un argumento posible para plantearle a
a mi abuela paterna.La vasca,la del campo, la viuda que crio dos hijos sola, aquella de la cual casi ni conocí su voz y fué , y es, un misterio para mi.
Gracias a Dios por ese sexto sentido que siempre me avisaba... con una cosquilla en la nuca, ¡¡¡¡¡corrrrreeeeeeé! El sigilo de mi abuela era increible ( y eso que la puerta del fondo hacia ruido) Nunca la veia venir, ni la oia, pero sabia cuando ya la tenia lo suficientemente cerca y con la carga de malas intenciones para con mi persona fisica.
Venia rapido, demasiado para alguien de su edad y que no deberia estar tan apurada.Lo que me preocupaba siempre era esa ramita con la que la veía venir.Ya sabía sin necesidad de verla que venia con una varita del rosal, al que yo hacia hasta con las espinas,en la mano, y blandiéndolo cual samurai.
Como esos personajes de historieta que dejan una nube de polvo al salir a los pedos, asi salia yo . Disparado hacia el fondo, y de un salto a trepar la pared y buscar asilo en las alturas , donde nadie, absolutamente nadie mas que yo podia llegar.Mientras escuchaba esas pocas palabras que tenia reservadas para mi: "pieldejudas".Piel de judas. Pasó mucho tiempo hasta que pude saber el significado de esas palabras.¿porqué la piel y no los huesos o las manos, o los ojos? La piel
domingo, 10 de agosto de 2008
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